Entrevista en Radio Exterior de España
Lo que sigue es el texto preparado para una
entrevista que se me hizo en el programa Horizonte de Radio Exterior de España, presentado por el Padre Manuel Muñoz y
emitida el sábado 16 de agosto de 2014.
-- Decir que el Papa Francisco está siendo
un auténtico acontecimiento es quizás decir poco, aunque bien sabido. Sus
pasos, sus gestos, sus palabras, sus viajes, sus decisiones se siguen al
detalle y por doquier. Hoy queremos detenernos en una sus aportaciones que
quizás estén pasando más desapercibidas. Nos referimos a su impulso a la unidad
de los cristianos y al diálogo interreligioso. Para ello, y centrándose, sobre
todo, en su peregrinación a Tierra Santa de los días 24 a 26 de mayo pasado,
conversamos con Manuel Barrios Prieto, director del Secretariado de la Comisión
Episcopal de Relaciones Interconfesionales, de la CEE.
-- Manuel, ¿estás de acuerdo con nosotros en que
quizás la dimensión ecuménica del ministerio del Papa Francisco esté pasando un
tanto desapercibida en comparación con otras dimensiones de su tan espléndido
servicio? ¿Cuál es su razón?
Al ser tan rico el pontificado de papa
Francisco en gestos y palabras, relacionados con distintos ámbitos de la vida
de la Iglesia y de la sociedad, que van de la familia a la preocupación por los
pobres, a la justicia social, a la búsqueda de la paz, a la reforma de la curia
etc., la dimensión ecuménica puede que no destaque tanto en un determinado
momento y en lugares donde no es una cuestión prioritaria como en España, donde
la presencia de otras Iglesias es minoritaria. Sin embargo, debemos tener presente
que esta dimensión, como también la interreligiosa, está presente desde el
mismo comienzo del pontificado de este papa y es ciertamente una de sus prioridades.
-- El 16 de junio pasado Francisco recibió, ya por segunda vez, al primado
anglicano, al arzobispo de Canterbury, Justin Welby. Un apunte primero sobre el
anglicanismo y sobre los puentes de diálogo, encuentro y unión.
El diálogo ecuménico con la comunión
anglicana que empezó con fuerza a finales
del siglo XIX ha pasado por distintos
momentos, algunos en los que la unión parecía estar al alcance de la mano, como
cuando en los años 80 se debatía la Relación Final de la Comisión Internacional de Diálogo Anglicano-Romano
Católica que parecía haber alcanzado un
consenso amplio en temas como la Eucaristía, el ministerio ordenado y el ejercicio
de la autoridad, a otros, como el actual, donde algunas decisiones tomadas en
el ámbito de la comunión anglicana, como la ordenación de mujeres o la
bendición de uniones de parejas del mismo sexo, han creado obstáculos que pueden
parecer insalvables.
Fuente de la imagen: elheraldo.hn |
-- En el final de su discurso a Welby, Francisco apostó por avanzar hacia la unidad a través de la
tres “p”: (prayer/plegaria; peace/paz; poverty/pobreza). Más allá de lo ingenioso y didáctico de la idea,
¿nos glosas y concretas su significado?
Teniendo en cuenta la
dificultad del diálogo ecuménico con la comunión anglicana en la actualidad, es
muy significativa la insistencia del papa en que aunque la plena unidad pueda
parecer una meta lejana, sigue siendo la meta. No nos podemos limitar solo a hacer
cosas juntos por el bien de la humanidad, como la muy importante iniciativa del
Global Freedom Network, una plataforma en la que participa la Iglesia católica,
junto con los anglicanos y los musulmanes, para luchar contra las formas modernas
de esclavitud. Debemos esforzarnos por caminar juntos hacia la unidad sin
dejarnos desanimar por las dificultades que tampoco podemos fingir que no
existen. En esta línea se enmarca esa idea de las tres ‘p’ -plegaria, paz,
pobreza- que nos ofrece unas orientaciones de base para seguir adelante con
confianza disponiéndonos para el actuar de Dios que es el verdadero agente de
la unidad. Por tanto, junto al seguir profundizando en el diálogo teológico,
hay también que seguir adelante con el diálogo de la vida, orando juntos, buscando
caminos de paz, optando por los pobres. Esta es el camino para disponernos a la
plena unidad que es un don de Dios y que llegará cuando Él quiera y como Él
quiera, retomando una célebre expresión del abad Couturier.
-- Aun cuando la Santa Sede está siendo sumamente cautelosa al
respecto, ¿de qué datos disponemos sobre los ordinariatos, instaurados en 2010 por Benedicto XVI para anglicanos
que abrazan la comunión plena con la Iglesia católica?
Tenemos pocos datos.
Parece que el número de fieles que han sido acogidos en ellos no es tan elevado
como se esperaba en un principio. El primero que se creó fue el Nuestra Señora
de Walsingham para acoger a los anglicanos ingleses y, según algunas publicaciones,
el número de miembros puede rondar los 1500 incluyendo unos 90 exministros
ordenados. Para los otros ordinariatos, como el de Estados Unidos y el de Australia,
no tenemos datos oficiales.
En relación a esto es significativo lo que
dijo papa Francisco en su primer encuentro con Justin Welby hace un año, cuando
agradeció la comprensión que han tenido los anglicanos de los motivos que
llevaron a Benedicto XVI a instituir estas estructuras canónica para acoger a los
anglicanos que querían unirse a Roma también de forma corporativa.
-- ¿Tienes alguna referencia
sobre cómo se viven dentro del anglicanismo este tema?
Cuando en 2009 se
anunció la Constitución Apostólica de Benedicto XVI sobre este tema, se emitió
una declaración conjunta del arzobispo católico de Westminster y el entonces
primado de la Comunión Anglicana, el doctor Rowan Williams, que hablaba de los
ordinariatos como fruto del diálogo ecuménico. Por tanto, oficialmente esta
iniciativa tuvo una buena acogida ya que venía a resolver una cuestión interna complicada
de la comunión anglicana en la que había muchos que querían marcharse después
de las decisiones que algunas Iglesias locales habían tomado sobre asuntos
debatidos.
-- Una de las fotos del viaje de Francisco a Tierra Santa fue la de su
abrazo en el Muro de las Lamentaciones con un rabino y un imán, los tres amigos
y los tres argentinos. ¿Nos cuentas?
Es una de esos gestos espontáneos del papa
que ya forman parte de su
Pontificado y que expresan mucho más que muchas
palabras. Ese abrazo ante el muro occidental que delimitaba el monte del templo,
el lugar más sagrado del mundo para muchas personas y que ha sido motivo
también de tantos enfrentamientos, expresa el anhelo de paz ínsito en toda auténtica
religión y en todo hombre de bien y la importancia de los lazos de auténtica
amistad.
Fuente de la imagen: clarin.com |
-- En varias ocasiones, Francisco ha afirmado que la unidad de los
cristianos está en el camino, que la unidad llegará caminando. Un comentario
tuyo al respecto.
La imagen del camino es
muy utilizada por el papa y lo es en contextos diversos. Yo me atrevería a
decir que para él está muy ligada a ese texto del evangelio de san Lucas de los
discípulos de Emaús que se encuentran con el Señor resucitado, texto que él ha citado
en discursos importantes como el que pronunció ante los obispo brasileños
durante la última Jornada Mundial de la Juventud, exhortándoles a acompañar a
los que huyen de Jerusalén, de la Iglesia, dialogando con ellos y sabiendo
entrar en sus noches. Caminando juntos, en un ecumenismo de la vida, escuchando
al otro, meditando la Palabra de Dios juntos, se puede llegar a descubrir la
presencia del Señor resucitado en medio de nosotros y quizás un día podamos
llegar a partir el pan juntos.
-- Mucho revuelo informativo tuvieron las palabras del Papa Francisco,
en la rueda de
prensa en el avión de regreso de Tierra Santa, sobre la praxis
católica del celibato sacerdotal. La pregunta, realizada por un periodista
alemán, se contextualizaba también en el ecumenismo, en concreto, en la
relación con la Ortodoxia. ¿Qué dijo el Papa? ¿Qué relación tiene este tema con
el ecumenismo?
Jesús con los discípulos de Emaús Claustro del Monasterio de Santo Domingo de Silos (Burgos) Fuente de la imagen: fotoviajero.com |
Lo que hizo el papa
Francisco en esa rueda de prensa fue reiterar la doctrina tradicional católica
de que el celibato no es dogma de fe y que ya existen sacerdotes católicos
casados en las Iglesias de rito oriental que están unidas a Roma. Sobre lo que más
insistió el papa es que este es un tema secundario en el diálogo ecuménico en
el que es preciso abordar antes otros temas más importantes. También afirmó,
como ya hemos señalado, que la unidad se hace al caminar juntos, orando juntos,
trabajando juntos y ayudándonos mutuamente.
-- Nos centramos en el viaje a Tierra Santa de finales de mayo pasado.
Su ocasión y su lema eran, hasta oficialmente, ecuménicas y hasta la misma
iniciativa del viaje procedió del patriarca de Constantinopla. Unos apuntes
sobre ello, Manuel.
El viaje a Tierra Santa
surgió con motivo del 50 aniversario del encuentro en
Jerusalén entre el papa
Pablo VI y el patriarca Atenágoras. Ese encuentro que tuvo lugar después de
terminada la segunda etapa del Concilio Vaticano II, antes de que se aprobara
la Constitución Dogmática sobre la Iglesia y los decretos sobre el ecumenismo y
las Iglesias orientales, y que llevó a la revocación de los decretos de
excomunión mutua entre las dos Iglesias, marcó un antes y un después en las
relaciones ecuménicas.
El papa Pablo VI y el patriarca Atenágoras Jerusalén, 5 de enero 1964 |
-- ¿Esta prioridad ecuménica de la peregrinación a Tierra Santa puede
quedar luego, al menos en la opinión pública y publicada, algo desdibujada,
disminuida? ¿Por qué?
Porque un viaje de un
papa a Tierra Santa implica siempre varios aspectos junto al ecuménico, como el
interreligioso, el político, el diplomático, el que hace referencia al apoyo a
las comunidades cristianas locales, y hoy también hay que tener en cuenta en un
viaje de un papa a esa región la situación de los refugiados, la persecución que
sufren los cristianos y las guerras en los países cercanos. Cualquier palabra
del papa y cualquier gesto, como tocar el muro que separa los territorios
palestinos de Israel, puede tener mucha repercusión en los medios, dada la
situación política en la región.
-- ¿Te esperabas más, te esperabas menos de la declaración conjunta suscrita en Jerusalén entre Francisco y Bartolomé?
Con el papa Francisco hay que tener presente,
junto a las palabras, también los
gestos. Por eso, junto a la declaración
conjunta fue muy significativa la celebración ecuménica que tuvo lugar en la
basílica del Santo Sepulcro, ‘de donde todo nació’, como dijo el papa en el
discurso que pronunció. De todos modos, también en su contenido la declaración
conjunta con su solemnidad aborda los temas más importantes que preocupan a las
dos Iglesias.
El papa Francisco y el patriarca Bartolomé en la Basílica del Santo Sepulcro Jerusalen, 25 de mayo 2014 |
-- Se ha dicho que esta declaración fue una “carta”, “un decreto de
validez” a estos 50 años últimos de ecumenismo. ¿Cuál es tu parecer?
Sí, no estaría descaminada
tal interpretación. Al regresar el patriarca Bartolomé de este encuentro en
Jerusalén con el papa Francisco, habló de la posibilidad de un encuentro en
Nicea en 2025. Un acontecimiento que podría ser importantísimo para restablecer
la unidad de la Iglesia si tenemos en cuenta que en esa ciudad se celebró el
primer concilio verdaderamente ecuménico en el año 325, del que salió el Credo
que rezamos en nuestras celebraciones y que es expresión de la fe de la gran
mayoría de cristianos, tanto de oriente como de occidente. También fue la
introducción del ‘filioque’ en ese credo el motivo oficial del cisma.
-- En la declaración, Manolo, se habla de la importancia del que
podíamos denominar ecumenismo ecológico o de lo creado. ¿Qué es, cuál es su transcendencia?
Sí, la salvaguardia de la creación es un tema importante en el ámbito
ecuménico al que son sensibles la mayoría de las Iglesias y que surgió con mucha
fuerza en la Asamblea del Consejo Mundial de Iglesias celebrado en Vancouver en
1983. En esa ocasión se exhortó a un compromiso de todos por la justica, la paz
y la salvaguardia de la creación. En 1989 el entonces patriarca de
Costantinopla habló con ímpetu sobre la importancia de este compromiso y se estableció
una Jornada para la salvaguardia de la creación que se celebra desde entonces
en muchas Iglesias el 1 de septiembre que coincide con el año nuevo ortodoxo.
También el papa Francisco, en la homilía de la misa de comienzo de su
pontificado en la solemnidad de san José del año pasado, reflexionando sobre el
término latino custos aplicado al
esposo de María, insistió sobre la importancia de custodiar la creación que se
nos ha confiado.
-- Hemos de ir concluyendo, Manolo. Un minuto y medio final en total
para que nos compartas tu reflexión sobre los discursos de Francisco y
Bartolomé en Jerusalén.
Creo que más que los
discursos hay que fijarse en los gestos, empezando por el
primero de todos que ha
sido volver a encontrarse en Jerusalén 50 años después del histórico abrazo
entre Pablo VI y Atenágoras. Yo también le doy mucha importancia a la oración
que se hizo ante el sepulcro vacío de Jesús, lugar en el que tuvo lugar el
acontecimiento del que nació la Iglesia una, que salió a anunciar la buena noticia
de Jesús muerto y resucitado.
El papa Francisco con Shimon Peres y Mahmud Abbas Fuente de la imagen: infonews.com |
-- ¿Sabes cómo se han vivido en la Ortodoxia estas jornadas de
Jerusalén?
Es difícil decirlo
porque el mundo ortodoxo es muy variado. Como también entre nosotros hay
algunos que no ven con muy buenos ojos los gestos ecuménicos e interreligiosos
del papa Francisco, esto pasa con más intensidad en el mundo ortodoxo. También hay
que tener en cuenta los distintos patriarcados que existen en la Ortodoxia con
sus distintas sensibilidades y la situación de los cristianos árabes en los
países de la región.
-- Y por último, ¿cuál
es el significado ecuménico de la
histórica Oración por la Paz del 8 de junio? Y también su significado
interreligioso.
Sabemos lo importante que son para
los cristianos de Palestina e Israel las relaciones entre la autoridad
palestina y el estado de Israel. También sabemos que la paz es un don y que la
oración puede hacer milagros y abrir caminos donde parece que no los hay.